Mazón dimite como president de la Generalitat con críticas al Gobierno pero seguirá como diputado: «Ya no puedo más»
"Habría dimitido hace tiempo, ha habido momentos insoportables para mí y mi familia. Ya no puedo más", ha dicho
El president de la Generalitat valenciana, Carlos Mazón, ha anunciado su dimisión en una comparecencia institucional sin preguntas en la que no ha convocado elecciones anticipadas y ha lanzado críticas al Gobierno de Pedro Sánchez. Y lo hace un año después de la dana en Valencia en la que murieron 229 personas porque «es el momento de reconocer errores propios» y la Generalitat necesita «un nuevo tiempo y que no haya una campaña de odio ni señalamiento contra nadie».
Mazón mantendrá su acta de diputado y sigue, por tanto, como aforado. «Habría dimitido hace tiempo, ha habido momentos insoportables para mí y mi familia«, ha aseverado, tras lo que ha dicho: «Ya no puedo más«.
«Sé que cometí errores, lo reconozco y voy a vivir con ellos toda mi vida. He pedido perdón y lo vuelvo a repetir, pero ninguno de ellos fue por cálculo político o por mala fe: no sabíamos que el barranco del Poyo se desbordaba, no supimos que había fallecidos hasta la madrugada del 30 ni que la tragedia tuviera esa magnitud», ha afirmado en una comparecencia en la que en ningún momento ha dicho la palabra ‘dimisión’. No aclara, ademas, los plazos de su salida y seguirá siendo president en funciones.
PP y Vox decidirán quién le sustituye
Ha apelado también «a la responsabilidad» de la mayoría parlamentaria que forman PP y Vox para elegir a un nuevo jefe del Consell que se ocupe de la reconstrucción tras la dana «ya encauzada» y ha reconocido sus errores «sin ambages», aunque ha cargado contra quienes han convertido en «deporte nacional» llamarle «asesino».
Mazón se va después de un año de continuas llamadas a su dimisión por parte del Gobierno central, de la oposición, de manifestaciones masivas en la calle y de abucheos en sus actos públicos, donde ha recibido gritos de ‘Mazón dimisión’.
Ha calificado los últimos días vividos de «duros, profundos, desgarradores, crispados y crueles«. «Soy foco de crítica y crispación», ha afirmado, para lamentar haber permitido «bulos muy dolorosos por no dar explicaciones a tiempo». En este sentido, ha dicho que no debió mantener su agenda el día de la dana, en el que no estuvo en el Cecopi en las horas más críticas de la trágica riada. Solo se sabe que tuvo un «almuerzo de trabajo» con la periodista Maribel Vilaplana, pero se desconoce por qué no llegó al Cecopi hasta las 20:28 horas. Precisamente ella ha declarado este lunes ante el juez.
En la comparecencia Mazón no ha escatimado en críticas al Gobierno de Pedro Sánchez: «Sé que el ruido que hay alrededor de mi persona es la excusa perfecta para ocultar la asunción de responsabilidades del Gobierno, tanto por la información errónea del 29 de octubre, el día de la dana, como en el retraso en la ayuda y la pésima reconstrucción».
Ante algo «tan grave» como la dana, hablar de su situación «personal, orgánica o política» le había parecido siempre «una frivolidad», ha señalado, para reconocer que había asumido ese «desgaste» desde el principio.
Toma la decisión tras la conversación con Feijóo este domingo
Mazón ha llegado poco antes de las 8:00 al Palau de la Generalitat, donde estaba previsto que anunciara la decisión sobre su futuro político tras un fin de semana de reflexión y tras hablar este domingo con el presidente de su partido, Alberto Núñez Feijóo.
La presión sobre Mazón, tanto interna como de la oposición y de las víctimas de la dana, ha ido en aumento en los últimos días, sobre todo tras los insultos y gritos de dimisión por parte de los familiares de las víctimas durante el homenaje de Estado del pasado miércoles. Una circunstancia que llevó al todavía president a asegurar que haría «cargo» y que llevaría a cabo «un proceso de reflexión personal».
Mazón ha defendido que, ante el «tsunami inimaginable» que destruyó «materialmente y anímicamente» la provincia de Valencia, «desde la Generalitat Valenciana se ha hecho absolutamente todo». «Reitero hoy que jamás un gobierno autonómico ha abordado un reto ni remotamente parecido», ha dicho Mazón, que ha vuelto a cargar contra «la falta de ayuda clamorosa» del Gobierno central.
De esta manera, ha dedicado gran parte de sus palabras a criticar al Ejecutivo central y, en concreto, al presidente, Pedro Sánchez, a quien ha llegado a calificar de «mala persona». Sobre él mismo ha afirmado: «Espero que cuando baje un poco el ruido la sociedad pueda distinguir entre un hombre que se ha equivocado y una mala persona».
«Es momento de reconocer errores propios»
Mazón ha indicado que «es momento de reconocer los errores propios» que le sitúan en el centro de la crítica política como máximo responsable de la Generalitat en esta histórica tragedia.
Un error, ha dicho, fue no pedir al Gobierno de España la declaración de emergencia nacional, como le aconsejó el presidente del PP «y tenía razón», pues días después se vio que les «quisieron dejar solos por estrategia política».
«Y sobre todo, mantener la agenda de ese día», ha insistido Mazón, quien ha añadido que con los datos del mediodía y la Confederación Hidrográfica del Júcar «certificando que el barranco del Poyo estaba seco» y el temporal «yéndose a Cuenca a las 18:00» y «ni una gota de agua» en Catarroja o Paiporta, era «inimaginable» que el Poyo se convirtiera «en una trampa mortal».
En este sentido, ha admitido que debía «haber tenido la visión política» de suspender su agenda y desplazarse hasta allí, y al no hacerlo cometió «otro error», el de «permitir que se instalara en el imaginario social» la idea de un president «ajeno a la emergencia».
El Gobierno ha acusado a Mazón de dimitir «tarde» y «mal», además de «no tener valentía» para convocar elecciones y le ha lanzado: «Llevamos más de 8.000 millones de ayudas». Por su parte, Feijóo ha dicho que su decisión es «correcta» y que Mazón ha sido sometido a una «cacería política». Ha apelado, además, a Vox para elegir un nuevo presidente.
Fuente: Agencias