El papa Francisco ha pasado una noche tranquila y continúa el tratamiento tras salir del «peligro inminente»
Su situación es "estable" y su pronóstico ha dejado de ser reservado, según el último parte médico
El papa Francisco ha pasado una noche tranquila y retoma la terapia este martes, al inicio de su jornada 26 de ingreso en el hospital Gemelli de Roma por la neumonía bilateral y los problemas respiratorios que atraviesa, habiendo consolidado su mejoría pero aún en tratamiento por la situación «compleja» de su cuadro clínico.
Su situación es «estable» y su pronóstico ha dejado de ser reservado tras haber salido del «peligro inminente» por la infección respiratoria, según el último parte médico proporcionado por el Vaticano este lunes. «Las mejoras registradas en los días anteriores se han consolidado aún más, como confirman los análisis de sangre, la objetividad clínica y la buena respuesta a la terapia farmacológica», afirmaba el comunicado.
El papa continuará este martes su reposo en el apartamento privado de la décima planta del Gemelli, mientras se ejercita con fisioterapia motora y respiratoria. Por el día, recibe altos flujos de oxígeno con cánulas nasales y por la noche usa la ventilación mecánica, con una máscara.
Y volverá a seguir en vídeo los ejercicios espirituales de la Curia Romana por la Cuaresma en el Aula Pablo VI del Vaticano.
Sus médicos estiman que el pontífice argentino de 88 años tendrá que permanecer “unos días más” en el hospital. Lo que podría significar el regreso del papa al Vaticano en un futuro próximo.
La hospitalización más larga de su pontificado
La hospitalización del papa Francisco, la más larga de su pontificado, se produce después de que ya se hubiera visto debilitado por una serie de problemas en los últimos años: sobrepeso, dolores de rodilla, sufrido, entre otras cosas, operaciones de colon y abdomen, así como repetidas infecciones respiratorias.
El santo padre sufre debilidades respiratorias, en particular debido a la extirpación del lóbulo superior del pulmón derecho a la edad de 21 años. Estos problemas de salud han reavivado los interrogantes sobre su capacidad para asumir sus funciones y las especulaciones sobre su posible dimisión.
Este lunes, Francisco participó en los ejercicios espirituales, siguiendo la conexión con el Aula Pablo VI. Tras recibir la Eucaristía, se retiró a la Capilla del piso privado para un momento de oración. También participó por videollamada a los ejercicios espirituales de la Curia.
Fuente: Agencias